Cuando alguien acude a la consulta solicitando una cita como indemorable porque lo que ha leído en el inmenso mundo de internet lejos de tranquilizarle o darle la información precisa lo que le provoca es una ansiedad y preocupación excesivas e ingobernables, es para pensar que aquello que muchas veces decimos a la ligera de que el paciente tiene que informarse y saber de sus problemas de salud también tiene efectos secundarios.
Pero cuando alguien viene y te lo cuenta, puede que se estén poniendo los cimientos para hacer las cosas de otro modo. Aunque el camino no existe y tenemos que hacerlo juntos. Aprender de los errores.