sábado, 23 de noviembre de 2013

Por qué cantamos



"cantamos porque llueve sobre el surco
y somos militantes de la vida
y porque no podemos ni queremos
que nuestra canción se haga ceniza."
 Por qué cantamos.
 M. benedetti

No se si le pasará a mucha gente. Creo que  a algunos de los que nos movemos por esto que se ha denominado salud 2.0 sí le ocurre porque a veces lo hemos comentado. Tiene uno la sensación de que hay temporadas que uno "debe" explicar, justificar, argumentar sus andanzas, correrías y hallazgos que por la red se dan. Eso de que "a lo nuevo se le pide lo que no se le pide a lo viejo" va ganando por méritos propios su sitio en las próximas tablas 2.0 que Moisés baje del Sinaí.

Todo híbrido sabe, sabemos, que nada de lo que ocurre en el ámbito virtual es distinto a lo que ocurre en el mundo más físico. Las mismas incongruencias, las mismas contradicciones, las mismas conductas no avaladas, los mismos encuentros y desencuentros, la misma vida en definitiva. Por eso no deja de sorprenderme la cantidad de gente que se encuentra uno en el camino cuya única razón de ser parece ser pedir credenciales, señalar faltas, ironizar sobre aquello o aquellos que se significan, etc.. Hay mucho leñador con el hacha afilada para hacer leña del árbol caído. Y lo hace señalando con el  dedo sólo lo  que ocurre a través de una pantalla olvidando la viga en el ojo propio.
También se encuentra a veces uno en el camino con camaleones que se mimetizan y adoptan formas y colores similares aunque intenciones distintas. Aquellos que están aquí porque no quieren perder trenes, porque hay que estar, en definitiva por una querencia por los escaparates.

Como dijo alguien alguna vez, lo importante no es por qué llegas, si no por qué te quedas. Yo me quedo porque encuentro gente con la que me identifico, personas que han supuesto para mí  una motivación y una ventana abierta a sentir que hay una manera distinta de hacer las cosas y que mi profesión no se acaba en la medicina,  ni en mi práctica asistencial. Me quedo porque aquí encuentras relaciones tan fuertes (y tan débiles) como en el mundo físico. me quedo porque en definitiva aquí aprendo y aquí crezco. Como profesional y como persona.

Así que en estos días raros en los que personas que tienen importancia en mi vida se encuentran inciertos y confusos, en estos días en los que hay gente quemada pero que tienen mi admiración por haber creado manifiestos y andan poniendo empeño personal en definir y redifinir la sanidad del futuro, en estos días en que personas nos demuestran que desde puestos de responsabilidad  también se puede luchar por hacer mejor las cosas y de modo diferente aunque no se les reconozca, e incluso paguen un precio por ello, en estos días en que hay gente a la que no se le ve pero a la que tampoco se le olvida, no hacía más que pensar cómo mandar un abrazo de esos que también, y tan bien,  me enseñaron a dar aquí. Al final, me ha salido ésto.

Hablo de mucha gente aquí que no nombro. Algunos tienen la costumbre de leer este blog. Daos por aludidos.

PD Efectivamente ésta es una entrada para justificar. "No hace falta" dirán muchos, pero últimamente mis tripas tienen ganas de expresarse más que mi cabeza.

jueves, 14 de noviembre de 2013

Postureo innovador












"La innovación está en la periferia y nunca en el centro" Me gustó cuando oí esa frase un día en la radio (siento no recordar a quién)  y la repito como un mantra. La repito también con un poco de vergüenza por no querer ser pesado ante gente que me la ha oído decir unas cuantas veces. Por eso la sociedad nunca cambia sustancialmente desde ningún gobierno, sino desde los movimientos ciudadanos. Por eso la mejora en las organizaciones no vendrá nunca de sus directivos, que muchas veces gastan su energía y la de sus mandos intermedios en mantener la homeostasis, y en su papel de auto-checking  para detectar fugas en el sistema. Por eso a los sanitarios nos mejoran los pacientes que no encuentran satisfechas sus necesidades en nuestras consultas. Son esas fuerzas vectoriales las que "nos pinchan" y nos retan y las que nos estimulan a buscar soluciones (nuevas?) a problemas de siempre. Fuerzas siempre centrípetas y pocas veces centrífugas.

¿Por qué apuestan tanto las organizaciones hoy en día por la innovación? No tengo ni idea. A veces pienso que lo hacen desde la imagen, a veces puede que lo hagan por supervivencia, porque si no cambian, se van al garete, a veces pienso que lo hacen por moda, ... Últimamente a todo eso en las redes sociales se le llama postureo.

Lo pienso cuando detecto miedo y demuestran que no saben o no quieren confiar en sus trabajadores. Lo pienso cuando dicen unas cosas y hacen otras. Lo pienso cuando veo a mucha gente con iniciativa que dedican mucho tiempo y esfuerzo personal en involucrarse por mejorar en su trabajo con aportaciones novedosas y acaban teniendo la sensación de que ha sido una vivencia dónde se han sentido huérfanos de apoyo y reconocimiento. Lo pienso cuando el verbo delegar se conjuga en términos de "tú ejecuta lo que yo pienso". Lo pienso cuando tengo la sensación de que nos sacan a bailar porque no quieren ver la pista de baile vacía pero la música la tocan siempre los mimos.

Hoy en algún momento he pensado que innovación es "descomplicar" lo que llevamos años complicando. Pero no se si aprendemos.